La opinión de Manuel IV

Hola, soy Manuel.

         Esta vez escribo para los padres, familiares y parientes de niños que practican algún deporte en equipos de barrio, como el nuestro.

 

Manuel

         Para llegar a ser algo en la vida, sea la profesión que sea; hacen falta tres cosas: talento, aptitudes y actitud.

         Todos tenemos un talento determinado para desarrollar bien una actividad predeterminada, muy bien o mejor que los demás, ya sea para médico, profesor , atleta o lo que fuere.

Aptitudes son las condiciones físico/psíquicas que nos hacen falta para desarrollar nuestros talentos.

         Y actitud es la forma de encarar la vida, el comportamiento que cada uno empleamos para hacer las cosas, el ánimo de lucha, de sufrimiento, la capacidad de trabajo y demás connotaciones que nos hacen seguir adelante y llegar, o quedarnos en el camino. Porque fracasar no es no llegar, sino no intentarlo.

         Y todos nosotros, padres; siempre pensamos que nuestros hijos son mejores y tienen más talento, aptitudes, actitud y medios para desarrollarse en lo que quieran ser que lo que fuimos o tuvimos nosotros. El problema surge cuando creemos saber lo que quieren ser y sin embargo les estamos proyectando la imagen de lo que nosotros quisimos ser y no fuimos. Por eso, siempre pensamos que mi hijo es mejor que fulano o mengano en ciertas actividades necesarias para su desarrollo posterior, pero o le tienen manía o no le entienden, o le miden “con otro rasero”. 

         Hoy en día la función básica de los clubes deportivos de barrio (fútbol, baloncesto, atletismo, etc.) no es intentar crear figuras de élite del deporte;  para eso ya están lo cazatalentos de los “grandes”.  No, los equipos de barrio sirven para encauzar la prolongación de una educación que parte de cada casa y familia, pasa por los centros de estudio y termina en actividades lúdico/deportivas, que a través del juego y del deporte reafirman conceptos como amistad, camaradería, respeto, lucha y tesón, entre otros muchos. Conceptos que en un mundo tan competitivo y despiadado como el que nos toca vivir, se van perdiendo paulatinamente. ¿Cuántos amigos de verdad tenemos?¿Qué entendemos por respeto? ¿Cuál es la motivación que nos lleva a luchar por algo?.

         En los muchos años que llevo educando/entrenando equipos  de fútbol base quizá no pueda presumir de grandes logros deportivos (solo 2 ascensos en 27 años), pero si puedo hacerlo de que el 98% de los niños, adolescentes y adultos que han estado bajo mi tutela deportivo-educativa han formado “equipos humanos”. Yo sí tengo amigos de verdad salidos del fútbol. Yo sí intento respetar a los demás y sus ideas, de hecho jamás, y digo jamás, hasta la fecha;  me han sacado tarjeta de ningún color como entrenador. Y sí intento constantemente buscar la motivación que haga que mis “niños” ganen o pierdan, intenten estar alegres y felices haciendo deporte y no se vayan a la primera de cambio a practicar Wii, Playstation, Nintendo o litrona.

         Por supuesto que siempre hay quien discrepa y “abandona” mis equipos. Que cirujano no ha perdido un paciente alguna vez y por ello no deja de ser un buen cirujano. Es ley de porcentajes, es ley de vida. Pero quitando los que no han seguido por temas de salud, familiares o de trabajo; suelen abandonar aquellos que se consideran “mejores”, a rasgos generales; porque desde pequeño “alguien” les ha dicho que lo son, no porque demuestren serlo. Pero claro,  “el entrenador no le entiende”, “le tiene manía”, “le mide con distinto rasero”, “no le da los derechos que tiene ganados por tal o cual causa”, “juegan otros peores porque sus padres son amigos suyos, o le invitan a café, o a comer”, aunque no lo hayan hecho o visto hacer nunca, etc., etc., etc.

         Y es también, por porcentajes; que los que más se quejan y abandonan son los que menos talento, aptitudes y actitud tienen para la práctica del fútbol. Pero lo grave del tema es que los niños no son conscientes de lo buenos o malos que son por ellos mismos, sino en la medida en la que sus “familiares” se lo hacen ver menospreciando a los demás, o criticando a los entrenadores, o con los consabidos cuchicheos, cotilleos, correveidiles y sus “amplios” conocimientos de fútbol que han aprendido de los comentaristas de la tele.

         Y con todo ello solo consiguen confundir a los chavales. Chavales, que en mi caso, se divierten, son amigos, son camaradas, aprenden fútbol y no les importa jugar más o menos, ni ganar o perder en la medida en que valoran estos conceptos por sí mismos. Les gusta ser equipo, formar parte de él.

         Dejemos que los niños sean niños en todas las facetas en que les dure la niñez, porque es una época muy corta pero muy necesaria para hacerse hombres. Dejemos que sean felices en la medida en que podamos dejar que lo sean. Y si aún así, vemos que no lo son, hagamos como en la vida real: formulemos quejas reales con pruebas ante quienes deban decidir; que para eso están, o cambiémoslos de colegio, de médico o de equipo. Pero que sea por ellos, no por lo que nosotros creamos que es por ellos. Son niños, con criterios, ideas y sentimientos propios, que nosotros, los adultos; debemos ayudarles a comprender y desarrollar. Son personas en sí mismas, no propiedades de nadie.

         Dejémoslos crecer. Dejémoslos pensar por ellos mismos. Dejémoslos que se diviertan y sean felices. Y ayudémonos, entre todos; para que ello sea posible.

 

         Es la opinión de Manuel, en palabras de Manuel.

 

 

  1. El gaucho dice:

    Que cosas tan ciertas y no por ello menos lindas. Con gente como vos no existe el fracaso. Sos un ejemplo porque es cierto que animando se consigue mas que criticando. Seguid así por muchos años. Por lo menos hasta que mi «nene» tenga edad de poder entrenar con vos, sería un lujo.

  2. rosa dice:

    Muy bonito Manuel, espero que podais inculcar estos valores a los chicos para que realmente hagan equipos de personas que colaboran entre ellos y formen piña. Hablar mucho con ellos, yo lo haré también con los míos.
    Es admirable como dedicais tantas horas a entrenar a los chicos, los partidos y demás. Eso si que es amor al fútbol. Un abrazo.

  3. felix dice:

    No te preocupes por porcentajes, aunque te sean muy favorables. no es cuestión de cantidad sino calidad, y creo que tienes de sobra. A mí me sorprendió que en tan poco tiempo llegaras a conocer al niño, como persona, mejor que su tutor del colegio, pero es cierto. Y creo que eso no se improvisa.

  4. dani dice:

    Cuanta razon tienes manuel y decir como jugador que a pasdo por tu equipo que sigas enseñando como lo hicistes cuado pase yo, ojala entodos los equipos del barrio se hiciera lo mismo que en nuestra agrupacion y se mire mas por los jugadores que por el de la agrupacion

  5. Alejandro dice:

    Manuel, debo felicitarte y sacarme el sombrero ante tí. Creo que nadie podría haber explicado mejor lo que se quiere de los chicos, los padres y todos nosotros, me incluyo.
    Sabes bien que apesar de que mi hijo haya dejado el club, se que tengo todos los chavales de nuestros equipos que son mis segundos hijos y voy a muerte con ellos. Que sepas que esté donde esté, cuenta con mi apoyo. Cómo en la charla primero «Respeto», segundo «Humildad», tercero «Persona»,y cuarto «Imagen».
    Nuevamente, me quito el sombrero ante tí…
    Un abrazo y mis felicitaciones por tu opinión nº4. saludos.
    Alejandro Clara.

  6. Alex dice:

    Muy buena opinion manuel.La verdad es que lo que has escrito es una verdad como un templo y refleja claramente situaciones sociales,familiares y deportivas que ocurren hoy en dia.Creo que no solo eres un gran entrenador(que aunque no he estado a tus ordenes tengo gente cercana que sí ha estado contigo que me lo puede confirmar),sino que tambien eres un perfecto psicologo(cualidad muy importante -bajo mi punto de vista de jugador- para ser un entrenador comprensivo) y por encima de todo eres una gran persona,cosa que me demuestras cada vez que te veo e intercambiamos algunas palabras.
    Por todo eso y mucho mas,los ascensos se quedan pequeños al lado de los «equipos humanos» que tu has formado, y lo que de verdad conseguiras,y que ya has consegudio,son titulos en la vida misma.

    Te felicita por todo ello el capitan del juvenil «A».No cambies nunca Manuel.

  7. Jose R.G. dice:

    Muy Bien Manuel. Que comentario mas acertado, habría que dárselo a leer a casi todos los padres por no decir a todos, y todos los días antes y después de la convocatoria y partido, lastima que la pagina www no estuviera lista a principio de temporada o que se pueda publicar a tiempo real todos los comentarios, por cumulo de trabajo o falta de espacio en la www.

  8. Viti dice:

    Muy buen articulo, es un lujo tener a un escritor como Manuel en la página web, pero mas aún, un entrenador como él en el club.

  9. ikarox dice:

    Bien Manuel estoy bastante de acuerdo contigo,yo creo que este articulo lo deberias poner en la puerta del vestuario los jueves cuando haces la convocatoria.¡¡Y mira que nos quejamos los padres coño!!.Aunque te meta mucha «caña», la verdad es que los chavales del benjamin es este año cuando estan aprendiendo futbol entre otras cosas, asi que… que te dejen trabajar a ver si subes los porcentajes ;-D

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